¿Habías oído alguna vez hablar del Western Metal? Yo tampoco. Menos mal, ¿no? Llámame “antiguo” si quieres, pero yo veo más jebi un vikingo que un pistolero. Así que cuando vi esa portada feuchilla del último de Orden Ogan, me dije ¿¡no serán capaces!? Bueno, casi, casi. En fin, si la inspiración les permite hacer buena música, el resto me importa poco. Total, para el nivel de inglés que gastamos, como si dicen misa en latín…
Un poco de historia
Orden Ogan llevan ya un rato en esto, desde finales de los 90 concretamente, aunque su primer lanzamiento serio fue en 2008. Pero no fue hasta 2012 con To The End, y su The Things We Believe In cuando su éxito traspasó las fronteras alemanas.
Su estilo es muy característico, lo que siempre favorece para consolidar una carrera músical. En Alemania los comparaban mucho con Blind Guardian, pero en este trabajo percibo más un toque Power y menos Folk, hasta el punto de que me recuerdan más a Stratovarius que a Blind Guardian. Puede que estén todavía buscando su propio sonido, pero sin duda van por el buen camino.
Gunmen
Gunman, un intro con sintetizador da pie a un comienzo atronador, Orden Ogan arrancan quemando todas sus naves, todas las cartas hacia arriba. Un temazo como hacía mucho tiempo que no escuchaba: potencia, coros, melodía, riffs pegadizos, un solo de guitarra de bandera y un estribillo que se te queda incrustado en el cerebro.
Empezar así de fuerte es arriesgado porque piensas que el ritmo ya solo puede decaer, pero a continuación vienen otro par de temas sobresalientes: Fields Of Sorrow, más épico si cabe, sonidos folk, coros muy altos; y Forlorn And Forsaken. El ritmo no decae, y espera que llega lo mejor.
Vampire In Ghost Town es un tema que ha creado controversia entre los más acérrimos seguidores de los alemanes, pero para mí no hay discusión. Me encanta, y ha entrado por la puerta grande en mi listado de temazos de 2017. A estas alturas ya no te cabe duda de que tienes entre manos un gran disco. Un ritmo galopante, melodía, y unos coros que evocan poblados fantasma en el viejo Oeste. Su estribillo está diseñado para dejarse las cuerdas vocales hechas un guiñapo.
A continuación un pequeño descanso con Come With Me To The Other Side, un tema relajado con la participación de la vocalista de Leaves’ Eyes, Liv Kristine, y otro estribillo muy coreable con The Face Of Silence.
Después, seamos honestos, el disco pierde un poco de chispa con los siguientes temas. Son rápidos, son contundentes, pero sin chispa. Aquí tienes el respiro que necesitas para afrontar la despedida con el super-tema Finis Coronat Opus, de casi 9 minutos, “el final que corona la obra”. Un epílogo magistral para un buen trabajo que los posiciona de nuevo en todo lo alto, posición que deben consolidar con buenos directos.
Orden Ogan en concierto
Si te gustaría dejarte la garganta viendo a Orden Ogan en concierto estás de suerte: vienen a finales de octubre a España. Y lo mejor es que vienen fantásticamente acompañados por Rhapsody Of Fire y Unleash The Archers. Sobre los canadienses ya hablamos muy bien en nuestro artículo sobre Brittney Slayes. Su último disco, Apex, es una maravilla.
¡Ja, ja, ja! 😝.
Gracias a ti y a los «vampiros en ciudad fantasma».😂
Nota: Creo que no he visto esa peli.
Se agradece la excelente información🌟🌟 del artículo (¡vaya análisis tan detallado de los temas!), ya que, en mi caso, desconocía el estilo Western Metal.
Los temas enlazados de ORDEN OGAN son muy originales ¡vaya sonido!, al igual que la letra. Los vídeos en su temática desértica molan y la información avanzada que dan en las lápidas de Vampire in Ghost Town (¡me parto!).
¡Ah! Y si he leído el documentado artículo ha sido por la imagen atrayente de la portada GUNMEN (el bicolor capta la mirada y el dibujo es simple pero con fuerza).🔥
Gracias porque voy a escuchar todo el disco que recomiendas.⚡⚡
El gran Clint o John FFF (feo, fuerte y formal según su epitafio) escucharían este grupo estilo western.
NOTA: ¡SORRY! Discrepo respecto a tu primera apreciación. Un vikingo podría ser identificado más bien como «punky» (a mi modo de ver), mientras que un bandolero (pistolero del oeste) es claramente una imagen estética heavy (cabello largo que no ha conocido barbero, balas colocadas estrategicamente alrededor de la cadera, abrigo cuero largo hasta el gemelo, botas clásicas tachuelas o grabados en cuero, con su rifle indespegable a modo de guitarra, etc).
Jjjajjajajajaj… ¡qué bueno! ¡Pues tienes toda la razón! Por un momento me ha venido la imagen de Steve Vai en Cruce de caminos y me has convencido. Lo de Western Metal es algo que me vino a la cabeza, pero hasta ese momento no había leído nada acerca de que fuera un estilo «oficial» (aunque sí que es real que hay bandas de metal que usan el Viejo Oeste como leitmotiv de sus composiciones). En fin, me alegro de nuevo de leerte y de que estés disfrutando con los nuevos temas de esta banda. Gracias.
Interesante reseña. Les daré una oportunidad a ver qué tal.
Gracias por el artículo.
Muy buena la critica, directa a lo mas destacable, Orden Ogan son una de esas bandas que están a un milímetro de despegar y llegar al escalafón de los elegidos, léase Battle Beast o Powerwolf